Uno de los desafíos más grandes que tenemos los padres, es enseñarles a nuestros hijos a dejar el pañal, a que vayan solitos al baño. Esto es sin dudas muy difícil, ya que no sólo tenemos que estar completamente pendientes, si no que van a haber cientos de accidentes antes de que pueda lograr ir al toilette.
Lo que hace esto más complicado, más complejo es adelantarse, es muy importante empezar en el tiempo adecuado, ver las claras señales de que el pequeño está listo para dejar el pañal. Ahora, muchos padres cometen el error de enseñar a dejar el pañal antes de tiempo y el motivo suele ser por lo costoso que es el pañal, comparaciones con otros niños, entre otros.
Cada niño tiene su tiempo
Esos motivos que te he nombrado son razones equivocadas, justamente eso es lo que no debemos hacer, no son los motivos por el cual los niños tienen que dejar el pañal. Cada niño tiene su tiempo, no es sencillo identificar el momento indicado, pero lo que sí hay que hacer es prestar atención a cuando empiezan a tener cierto control. Esa es la señal.
- Alrededor del segundo cumpleaños suele lograrse el control de la caca.
- El control del pis diurno se consigue entre los dos años y medio y los tres.
- El pis nocturno puede seguir escapándose hasta los tres o tres y medio.
- Uno de cada cinco niños aún necesita pañales por las noches en el cuarto cumpleaños.
- Solo si llegan a los cinco años sin lograr el control (hablamos de descontrol frecuente, no de algún escape ocasional), cabe que exista un trastorno.
Esto es algo realizado por profesionales a base de investigaciones, pero repito cada niño tiene su ritmo y puede que tu hijo deje el pañal a los 2 años o antes, dependiendo de su control.
Cómo hay que empezar
Puedes comenzar preguntándole si quiere que le quiten el pañal para hacer pis o popo en el orinal o inodoro. Ahora, es importante que esto suene a estímulo y no a chantaje, si llegara a negarse entonces es mejor esperar un poco más.
Es muy importante tener precauciones por que a esa edad el niño empieza a afirmarse como persona y lo hará muy a menudo, todo a través del “no quiero”. No hay que mostrar un interés excesivo en lo que es la retirada del pañal pues su cuerpo es suyo y lo vacía cuando quiere. Y además si no esta todo bien, esto pasaría a ser una ocasión espectacular para que el pequeño nos lleve la contraria en algo que él controla.
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