No es ningún secreto que la paternidad no es una tarea sencilla, sino que está repleta de retos que debemos superar todos los días. Además, es algo que no debe tomarse a la ligera, ya que conlleva una gran responsabilidad, dado que es una vida la que está dependiendo de nosotros.
Es por ello que quizás, muchas parejas piensen bien antes de hacerlo, para tratar de encontrar el momento y la edad adecuada.
Sin embargo, hay otros que desde muy jóvenes tienen en claro que es lo que quieren y tener un hijo es un sueño al que esperan alcanzar desde edades tempranas. Un claro ejemplo de ello es Christina Ozturk, una joven oriunda de Moscú, Rusia, quien a sus 23 años es madre de 22 hijos.
Aunque para algunos es una cifra exagerada, la joven no piensa detenerse, sino que está convencida de que quiere formar la familia más grande del mundo. Ella y su esposo Galip, un millonario hombre de 56 años, es dueño de un hotel y planean tener 105 hijos biológicos. Fue por ello que en los últimos 10 meses tuvieron a 10 hijos a través de vientres subrogados.
“No sé cuántos serán eventualmente, pero no planeamos detenernos en 10.”
Según reseñó la pareja en una entrevista con Daily Mail, están sumamente felices y quieren continuar teniendo hijos. Christina, tuvo su primera hija, Vika a sus 17 años, antes de conocer a su actual esposo. Luego de tener varios hijos juntos, decidieron recurrir a la gestación subrogada para acelerar el proceso.
“En este momento, tengo 10 hijos con la última incorporación, Olivia, que llegó a fines del mes pasado. Yo misma di a luz a mi hija mayor, Vika, hace seis años. El resto de los niños son genéticamente nuestros de mi esposo y yo, pero fueron llevados por sustitutos. Simplemente no estamos listos para hablar sobre el número final. Todo tiene su tiempo.”
La idea en un principio era tener un hijo cada año, pero descubrieron que no estaba en la capacidad de hacerlo. Pues el cuerpo de Christina terminaría muy frágil y su salud sería delicada con el paso del tiempo. Así fue como ambos pensaron que el método de madres sustitutas sería la mejor opción para lograr su cometido.
“No conocemos personalmente a las madres sustitutas y no tenemos contacto directo con ellas para evitar problemas después del embarazo. Toda la comunicación se da a través de la clínica, solo monitoreamos indicadores de salud, hago un menú dietético para las madres para que la alimentación sea completa y miro los resultados de las pruebas.”
Para la agotadora tarea del cuidado de todos los niños, la pareja cuenta con varias niñeras y la familia sigue normas estrictas. Por ejemplo, los pequeños se van a dormir a las 8 de la noche y se levantan a las 6 de la mañana del otro día.
Cabe mencionar que los embarazos mediante vientres de alquiler no son nada baratos, ya que cada embarazo cuesta casi 10 mil dólares. Por suerte, Galip cuenta con el dinero suficiente para poder costear todos los tratamientos y han logrado materializar su sueño.
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