Cada padre es libre de criar a su hijo como mejor lo crea conveniente y no debemos interferir siempre y cuando se garantice la seguridad y la protección del niño. Además, cada uno tiene sus propios métodos de crianza y algunos funcionan mejor que otros. Sin embargo, es imposible evitar que las criticas salgan a la luz, independientemente de cómo eduque a tu hijo.
Esto lo sabe muy bien Lucy Dartford, una joven que se muestra orgullosa de ser una “mamá floja” (según sus propias palabras) a pesar de las críticas que pueda recibir por ello. La mujer es madre de Zuri, una pequeña de 4 años que deja que ella haga lo que desee hacer en su día a día, mientras se encuentran de vacaciones.
“La gente a veces se sorprende y pregunta cómo funciona, pero simplemente funciona. Se está convirtiendo en su propia persona y, como sabemos por la pandemia, la vida puede arrojarnos cosas que pueden interrumpir la rutina, por lo que es importante que los niños también sepan cómo lidiar con esa interrupción.”
Aunque a muchos les resulte extraño, Lucy le permite a su hija que decida cuándo se irá a dormir, quedarse en la cama todo el tiempo que desee o desayunar comida chatarra, por ejemplo. Muchos la han criticado por haberle dado tanta libertad a Zuri puesto que es muy pequeña.
No obstante, Lucy, quien es una madre soltera de 38 años, asegura que es una decisión “saludable” permitirle que haga lo que desea en vacaciones. Según ella, esto la está a ayudando a fortalecer su carácter y a descubrir sus gustos.
Cabe mencionar que durante el periodo escolar, la niña cumple con todas sus obligaciones. Lucy y Zuri tienen una rutina establecida con horarios bastante estrictos y los cumplen a rajatabla.
“Durante el periodo de clases, los niños suelen tener mucha rutina y es bastante completa, especialmente para niños pequeños como Zuri. Tienen que levantarse a una hora determinada, prepararse para la guardería o la escuela, el desayuno siempre es a una hora determinada, lo que, por su puesto, es saludable.”
Sin embargo, el periodo de vacaciones es un tiempo de disfrute, por lo que la joven madre, le permite a su hija que “haga lo que quiera”. Pues es un momento de relajación y para ella no está mal que aproveche este tiempo para descubrir todo aquello que le gusta hacer.
“Cuando se trata de vacaciones de verano, no creo que haya ningún daño en dejarles la libertad de decidir qué hacer y realmente ha sacado a relucir el mejor lado de Zuri. Es una oportunidad de tener un descanso de su rutina habitual y es muy amigable no tener que obligarla a seguir un horario diario estricto.”
En cuanto a sus vacaciones, Lucy también le ha permitido extender la hora de irse a dormir y no le impone una hora fija para hacerlo, como lo hace normalmente cuando debe ir a la escuela.
“A veces pide quedarse en cama durante el día y, de nuevo, está bien para mí, está muy dirigido por ella y simplemente funciona. Toda esta rutina ha transformado positivamente a Zuri, quien se ha convertido en una niña realmente independiente, feliz y relajada.”
Aunque el estilo de vida que lleva Zuri es bastante relajado, cabe mencionar que tiene límites y que su enfoque se encuentra “dentro de lo razonable”. “Zuri podría decir que no quiere cereales para el desayuno y preferiría pizza, siempre y cuando tenga un vaso de agua y un fruta también, por mi está absolutamente bien”, aseguró.
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