Durante la pandemia por COVID-19 la mayoría de los estudiantes alrededor del mundo tuvieron que dejar el colegio por el cierre momentáneo de las instituciones escolares, con el objetivo de disminuir los contagios. Sin embargo, muchos países ya volvieron a tener la asistencia al 100% de sus alumnos.
Uno de ellos es México, en donde los niños han regresado por fin a las clases presenciales.
Muchos de ellos por primera vez han comenzado a vivir la experiencia de la escuela, por lo que fue un momento muy emotivo tanto para los estudiantes como para sus familias.
Este nuevo comienzo ha dejado entrever algunas situaciones curiosas, en donde se destacó el caso de una niña llamada Valentina. La pequeña, aprovechó el nuevo año para “cambiarse de nombre”, y aunque era solo una broma, llegó bastante lejos.
Según lo que contó su madre, Thania Paola, su hija llegó a ser noticia en los medios mexicanos el primer día de clases. Es que la pequeña escribió en su gafete de identificación el nombre de Naydelin en lugar de Valentina, como una pequeña travesura.
El ingenio de los niños muchas veces es impredecible y muchas veces llega a sorprender a los adultos de muchas maneras. A veces sus travesuras nos hacen enfadar y otras son tan inesperadas que no podemos hacer otra cosa más que reírnos de la situación.
La madre, compartió en sus redes sociales una foto en donde se puede ver a la niña con el nombre “Naydelin” en su gafete y sonriendo en el aula. Lo que la mujer no esperaba es que la travesura de su hija terminara en un incómodo y desagradable momento para Thania, quien tuvo problemas con la institución.
Tal como lo contó Thania, cuando llegó al colegio a retirarla en el horario de salida, pero las docentes no le creían que se trataba de su hija. Pues la mujer, dijo que quería llevarse a Valentina, pero no había nadie con ese nombre en el aula.
Además, ella negaba llamarse de esa manera, por lo que las autoridades escolares se rehusaban a dársela. Esto alertó a los docentes y pensaron que por algo la niña fingió tener otra identidad, por lo que no le permitían llevársela.
“No me la querían dar porque la escuincla dijo que se llamaba Naydelin. Que pedo Valentina”, escribió Thania en su cuenta de Facebook junto a la imagen desde afuera del plantel de la niña con el gafete con el nombre falso.
Al igual que otros niños de su edad, Valentina no midió las consecuencias de sus actos no que esto metiera en problemas a su mamá al momento de recogerla. Finalmente, luego de una larga conversación con las autoridades de la escuela para aclarar la situación, la traviesa niña pudo ser retirada por su madre.
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