Cuando celebran sus cumpleaños, la mayoría de los niños quieren que sus padres les puedan hacer los mejores regalos y obsequios, y esperan lo mismo de sus invitados. Es normal que ese día especial en donde ellos son los protagonistas lo quieran festejar con todas sus energías.
Por otro lado, también hay niños que salen de esos moldes y reglas, optando por algo distinto como regalo de cumpleaños. En lugar de los mejores juguetes, hay pequeños que prefieren que esos obsequios tengan un sentido distinto y que puedan servir para un objetivo en específico.
Esto mismo fue lo que hizo un niño cuando celebró su cumpleaños número 8. Se trata de Martín Miranda Gonzáles, quién organizó su fiesta con ayuda de sus padres, y en lugar de pedirle a los invitados que lleven obsequios, les pidió que llevaran alguna colaboración para los perritos de la calle.
Según la información compartida por el medio “La Estrella del Valparaíso”, Martín dejó su mensaje muy en claro en las invitaciones. En ellas, pidió a sus invitados que llevaran alguna colaboración para el Canil Lobita de su ciudad, un refugio que se ocupa de rescatar a los perros abandonados.
“Yo quise que otras personas y otros perritos tengan hogar, tengan familia, tengan comida, tengan agua, tengan lo que merecen, tengan cariño. Porque me preocupa las personas, los perros y los animales que están en la calle abandonados. Yo creo que la gente tiene que reflexionar y ser solidaria con los demás.”
Para Martín, es muy importante que, tanto las personas como los animales que están en la calle tengan una mejor vida. Según explicó el niño, lo que más quiere es que los demás comiencen a ver y a pensar más en su alrededor.
María Gabriela Gonzáles, madre del niño, contó que su hijo tiene un trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDA), lo que le provoca muchas dificultades, tanto en su vida diaria como en su escuela. No obstante, su perrito Hassam, ha sido muy importante para su desarrollo personal.
“La conexión con los demás es algo que se le dificulta mucho a los niños que tienen esta condición, pero es increíble como en este caso su mascota lo ha ayudado en su proceso de desarrollo.”
La conexión y el amor que siente por su perrito lo hizo interesarse más por las necesidades que pueden tener aquellos peluditos que están solos y abandonados en la calle. Para el niño, Hassan es más que un amigo para él y lo adora como si fuera su hermano. Es por ello que adora pasar tanto tiempo con su mascota y se siente agradecido de poder tenerlo.
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