Cuando realmente queremos algo, no importa cuantos obstáculos se nos presenten en el camino, no nos damos por vencidos. Siempre buscamos la manera de sobrellevar los momentos difíciles hasta lograr nuestro cometido.
Este el caso de Austreberto Martínez Galván, un padre que pasó de ser un taxista a un fabricante de autobuses a escala para los niños. Lo que comenzó como un regalo para su hijo, hoy son todo un éxito en México.
Austreberto Martínez Galván es un padre que vive en Almoloya de Juárez, México. En el pasado trabajaba como taxista y chofer de camiones de transporte público. Lamentablemente, sufrió un accidente automovilístico muy grave que lo postró en una cama por más de cuatro meses justo antes de la pandemia.
Debido a ello, perdió su empleo y la situación económica de su familia se complicó bastante, pues él era el sustento de la casa. Sin embargo, esto no fue un impedimento para que cumpliera la promesa que le había hecho a su hijo Alex: comprarle un auto eléctrico montable.
La crisis económica que estaba atravesando no le permitía poder comprarle el juguete que tanto ansiaba su hijo, por lo que decidió construirlo con sus propias manos y para ello utilizó materiales reciclados. En una entrevista a El Universal el padre contó su experiencia.
“El primer vehículo tenía algunas partes de DVD obsoletos, un diablito, fui a conseguir láminas tiradas, chácharas. No tenía conocimiento de nada, todo se me fue dando, conforme lo iba imaginando, iba buscando los materiales necesarios. El resultado fue un camioncito que se exhibió en el kínder al que asistía mi niño.”
A partir del primer vehículo que construyó inició su nuevo emprendimiento. Ahora, Austreberto Martínez Galván crea autobuses en escala para niños en el patio de su casa. Estos juguetes miden 1,9 metros de largo, 0,43 metros de ancho y 0,65 metros de alto. De esta manera, es posible que suban hasta dos niños.
Cada autobús cuenta con dos motores eléctricos, pueden moverse, tienen luces, bocinas y hasta una pantalla que el juego se sienta tan real como manejar un camión de verdad.
Rápidamente, la popularidad de sus autobuses eléctricos para niños hizo que su emprendimiento fuera todo un éxito.
A través de un video compartido en YouTube Austreberto Martínez Galván mostró como funcionaban los autobuses que diseñaba. Allí mostró el primero que diseñó para su hijo y desde entonces no ha parado de recibir pedidos de otros padres.
“Ahí comencé a recibir llamadas y solicitudes para la construcción de autobuses a escala. Además, tuvimos la oportunidad de participar en una exhibición organizada en Aguascalientes, donde llevé un carro similar al de mi hijo, pero ya con materiales como lámina, ángulos y soleras. Es decir, la estructura de un carro más elaborado.”
El éxito de sus ventas fue tanto que tuvo que sumar a su esposa y a una persona más para que lo ayudaran con la rotulación. Austreberto Martínez Galván confesó que tiene planes de expandir su empresa, pero para ello, primero necesita aumentar la producción y multiplicar sus ventas.
“Hemos intentado acceder a algunos apoyos económicos bancarios o de autoridades federales, para poder consolidar nuestra empresa. Con ello, quizá poder abrir más plazas laborales, pero ha sido muy complicado.”
Por el momento, Austreberto Martínez Galván disfruta haciendo de estos autobuses a escala por pedido. Además, se muestra feliz por haber podido cumplir con la promesa a su hijo. Sin lugar a dudas, este hombre es un claro ejemplo de lo que pueden hacer los padres por amor.
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