Si bien es cierto que la mayoría de los niños tienen ciertas actitudes o pensamientos dependiendo de su edad, hay algunos que logran sobresalir de alguna manera. Ya sea por su intelecto, la comprensión y la empatía de las personas que los rodean, la inteligencia para las asignaturas escolares, o la madurez para realizar actividades domésticas que otros niños a su edad no hacen, entre otros.
Mientras muchos de nosotros hemos crecido teniendo que hacernos cargo de algunas actividades del hogar desde temprana edad, en la actualidad eso no sucede tan seguido. Sin embargo, hay algunos que se han visto obligados a hacerlo, por los contextos de la vida en la que han crecido.
Uno de ellos es Liam, un niño de 10 años oriundo de Queensland, Australia, que cuida a sus dos bisabuelos: Julie, de 82 años y John, de 73. Además, debe hacerse cargo de las tareas del hogar y ayudarlos con algunas actividades de la vida cotidiana, ya que la edad avanzada de la pareja de ancianos, no les permite realizar algunas cosas.
El niño, llegó a la casa de sus bisabuelos cuando era solo un bebé y, aunque Julie y John habían pensado que sus días como padres habían quedado atrás, tuvieron que hacerse cargo de la crianza. En el 2012, su bisnieto, quien apenas tenía unos meses de edad, quedó bajo el cuidad permanente de la pareja de ancianos.

“Era un bebé hermoso y estaba feliz de tenerlo. Es un niño muy cariñoso y dulce, y muy amable con los demás”, dijo la mujer sobre Liam.
Cuando Liam cumplió los 8 años, asumió el rol de cuidador de sus bisabuelos, a quienes cariñosamente llama “papá” y “ninny”. Si bien la pareja de ancianos es autosuficiente, cuando se trata de las tareas del hogar, el niño las lleva a cabo felizmente, aumentando su lista de responsabilidades durante los últimos dos años.
“Cada vez que no puedo levantar o alcanzar algo, puedo pedírselo y él lo hace por mí. También riega el jardín, me ayuda con las compras, revisa el correo, cuida al gato y al periquito, prepara tazas de té y cosas por el estilo. Es un niño muy inteligente y capaz. Se organiza para la escuela y se prepara solo. Es un pequeño gran ayudante.”
La mujer, agregó que había perdido a sus tres hijos cuando Liam llegó a su casa, a quien consideró como a un retoño más. A pesar de que saben que él es una ayuda para el estilo de vida que llevan con su esposo, Julie, también tiene en claro que todavía es un niño.
“No quiero que se sienta atado a nosotros, pero mientras viva con nosotros nos estará ayudando y estoy muy agradecida por eso”, agregó.
Finalmente, Julie agregó que se siente emocionada por ver crecer a su nieto, y está muy feliz de poder compartir sus últimos años de vida a su lado.
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