Si eres madre, seguramente habrás notado que tu hijo se comporta de una manera diferente cuando está contigo respecto a cómo lo hace cuando está con los demás. Cuando lo dejas al cuidado de otra persona, ya sea su papá, sus abuelos, un tío, el colegio, etc., te comentan que se ha portado genial.
Sin embargo, a pesar de que los demás te cuenten que se ha portado bastante bien, que es un niño tranquilo o feliz, tú notas que cuando está contigo llora, grita o patalea. Por lo tanto, seguramente te has preguntado en más de una ocasión ¿qué estoy haciendo mal? O ¿por qué conmigo tiene berrinches?
El vínculo entre un padre y un hijo es indestructible si su principal motor es el amor
No te preocupes, al igual que tú, muchas madres se preguntan ¿Cómo es esto posible? o si están hablando del mismo niño con el que ella lucha todos los días para que coman, o se vayan a dormir sin cuestionar nada. ¿A cuantas mamás les sucede lo mismo?
El mal comportamiento de un niño cuando está con su madre es completamente normal. Esto se debe simplemente a la necesidad de llamar tu atención constantemente. La forma de hacerlo, generalmente es con berrinches, llorando o pataleando, pues es la mejor idea que se le ocurre.
Además, debemos tener en cuenta que nuestros hijos están aprendiendo a controlar sus emociones y la manera en que las expresan. Ellos ven en ti un lugar seguro donde ser ellos mismos, por lo que es importante que le enseñemos límites.
Según el dr. K.P. Leibowitz, psicólogo infantil: “Lo que encontramos fue que los niños de tan solo 8 meses podían están jugando felices, pero al ver entrar a su madre en la habitación, eran propensos a llorar, a liberar sus intestinos y a demandar atención inmediata.”
Aunque muchas madres han llegado a pensar que algo estaban haciendo mal en cuanto a su manera de criarlos, lo cierto es que es un comportamiento sumamente normal y esperable.
¿Por qué? Pues necesita llamar la atención de la persona más importante en su vida: su mamá. En la mayoría de casos, sucede cuando la madre está demasiado ocupada con tareas de la casa, trabajo y demás responsabilidades. No obstante, cada vez que tiene la oportunidad, tu hijo intenta pasar tiempo contigo y hacerte saber que él está ahí presente.
¿Quieres un hijo fuerte y seguro? Permite que duerma a tu lado
Si te preguntas cómo evitar este tipo de comportamientos con tu hijo, quizás, deberías pensar en cómo organizar tus tareas diarias para poder compartir un poco más de tiempo con tu pequeño.
Los niños siempre buscarán consuelo en su madre, pues en ella encuentran ese abrazo reconfortante cuando están tristes, tienen miedo o están enojados. Son las madres las que están presentes para brindar un beso cuando se han caído o palabras de aliento cuando no han conseguido lo que querían.
Generalmente, en los padres buscan otras cosas, como diversión, juegos y explorar el mundo. En cambio, las madres son esa protección que los niños asocian de manera innata e inconsciente con la supervivencia.
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