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Si tu hijo se sigue chupando el dedo, es hora de ayudarlo a dejarlo

dedo

Seguramente tu pequeño se chupa el dedo, algo que es bastante normal en los niños. De por si todo lo que tienen se lo llevan a la boca, es su forma de sentir las texturas, de sentir el mundo que los rodea y conocer cosas nuevas.

 

Sin embargo, chuparse el dedo es una manera de relajarse para los niños, casi todos lo hacen y generalmente alrededor de los tres años, dejan de hacerlos por sí mismos. Pero en caso de que tu pequeño todavía siga haciéndolo seguido, es momento de ayudarle para que deje de hacerlo.

 

Ayuda a tu hijo a dejar de chuparse el dedo

En muchos casos el niño se chupa el dedo para llamar la atención, son muchas las cosas que pueden hacer solo para llamar la atención. En esa clase de casos lo que debes hacer es no prestarle atención, no le des lo que quiere porque seguirá chupándose el dedo en este caso. Con eso en poco tiempo lo dejara.

 

No debes enojarte ni tampoco castigarlo, al contrario, deberías intentar incentivarlo e incluso recompensarlo con algo que le guste para que deje de hacerlo, intenta ayudar y motivar para que quiera dejarlo sin necesidad de que sea una orden.

 

Puede que algo suceda en su rutina que le haga sentir la necesidad de llevarse el dedo a la boca, por lo tanto, deberías considerar observar detalladamente durante un tiempo para averiguar si efectivamente hay algo que genera esto. En dicho caso deberías accionar para evitar que suceda.

 

En caso de que tu hijo ya dejara de chuparse el dedo, lo que tienes que hacer es intentar hablar con él de manera simple, con palabras que pueda comprender para de esta forma recordarle el hecho de que lo dejó.

 

Deberías ir poco a poco limitando los lugares en donde se chupa el dedo. Busca una manera ingeniosa de prohibirle, sin ser directo, que se chupe el dedo en ciertos lugares y poco a poco ve reduciendo los mismos, de esa manera poco a poco logrará dejarlo.

 

Y lo más importante, trabaja junto a tu pequeño para lograrlo juntos, no te enojes ni tampoco lo regañes porque no terminas logrando nada, al contrario. Deberías formar un equipo con él para lograr que deje de chuparse el dedo, aunque recuerda que este proceso puede demorar más o menos, dependiendo del niño y tu accionar.

 

Problemas derivados de chuparse el dedo

Ten en cuenta que los problemas de salud que puede llegar a generar el hecho de chuparse el dedo son unos cuantos, como deformaciones en la cavidad bucal, en los dientes, problemas al hablar, en la piel, en el dedo e incluso problemas sociales, incluso que la excesiva humedad a la uña haga que esta se vuelve débil y pueda quebrarse, etc.

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